El fútbol mueve pasiones, es uno de los deportes más importantes del mundo y tiene clubes y competiciones con millones y millones de aficionados. Es normal pensar que es quizás la actividad física más trascendente de la humanidad en el último siglo, pero esto queda para la opinión de cada quien.
Uno de los equipos más emblemáticos de la historia de este deporte se encuentra en Inglaterra, de manera más específica en la ciudad de Manchester, y no, no es el City. El Manchester United es un club reconocido en todo el mundo como uno de los más trascendentales y ganadores de Europa y del mundo. En las décadas más recientes ha conseguido una hegemonía o cuanto menos un dominio en todo el territorio británico y su presencia en la UEFA Champions League ha sido imprescindible para tener un buen espectáculo.
No obstante, los “red devils” se han desviado por completo de la senda ganadora y las últimas temporadas han sido un martirio total para sus fanáticos, quienes se preguntan desesperadamente No debe ser fácil pasar de ser el campeón indiscutible de tu país a tener que pelear siempre por un puesto que te permita “mendigar” un puesto de Champions.
No es tan fácil como señalar un motivo específico, pero sin lugar a dudas hay un hombre que marcó un antes y un después en la institución: sir Alex Ferguson. Fue uno de los técnicos más legendarios de la historia del fútbol y en sus casi treinta años de trabajo cosechó tantos títulos que sería difícil nombrarlos todos y sus años de conquista. Aquellos años dorados llevaron a los rojos a la cima del deporte y los convirtieron en uno de los equipos más aclamados del planeta.
Pero todo cambió el día que Ferguson se Marchó. Obviamente decir que esta es la única causa de la hecatombe deportiva sería desacertado, pues las autoridades ya debían tener claro que su entrenador no era eterno y que debían preparar un recambio que les permitiera hacer perdurar toda su gloria, pero no fue así.
Todos los técnicos que se han sentado en el banquillo de Old Trafford no han conseguido estar a la altura, y no, no se habla de llegar al nivel de Ferguson, sino conseguir temporadas con participaciones “decentes”. Por el contrario, lo que ha pasado es que el equipo pasó a ser un habitual quinto o sexto puesto en la tabla de posiciones inglesa.
Esto coincide con el auge económico y deportivo de algunos clubes, siendo el más emblemático el de sus vecinos: Manchester City ha conseguido instaurar una nueva hegemonía en la Premier League gracias a una buena inyección de capital que les permitió adquirir auténticas estrellas de fútbol y consolidar un buen proyecto deportivo.
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